Venezuela (Prensa de Monagas) Como un gesto de humildad y contrición catalogó el Obispo Enrique Pérez Lavada el acto de imposición de cenizas.En su sermón durante la eucaristía que marca el inicio de la celebración de la Cuaresma, el Obispo recordó que la imposición de la misma está vinculada con el reconocimiento de nuestros pecados y no con un acto de bendición, por ello los niños menores de 7 años no se les debe colocar.
El Obispo insistió que la Cuaresma es un momento de reflexión personal, espiritual y comunitario.Es un tiempo de doble gracia, dijo el Obispo, "es el inicio de la Cuaresma que representa los 40 días que Cristo se tomó para la reflexión y adicional a ello, este es el año jubilar del cincuentenario de la Diócesis de Maturín, por ello todos los cristianos debemos estar gozosos.
Cabe destacar, que la Catedral Nuestra Señora del Carmen estaba repleta de feligreses quienes aguardaban el acto de las cenizas.
Feligresía respondió al llamado pastoral
En el inicio de esta Cuaresma, en la Catedral estuvieron presentes todos los sacerdotes de Maturín.
Se prevé hacer unas jornadas de confesiones colectivas por lo que los sacerdotes de las distintas parroquias de la ciudad se estarán trasladando en conjunto para la realización de las mismas .
La misa de cenizas estuvo acompañada por Rapsodia Coro de Cámara , quien ha ganado distinciones internacionales como agrupación coral.Se tiene previsto que para mayo de este año se celebre el año jubilar del Cincuentenario de la Diócesis de Maturín, fecha para la cual está planificada una serie de actividades aún en proceso de programación.
Durante la ceremonia el Obispo bendijo las cenizas, que son producto de la quema de los ramos sobrantes de la misa de ramos del año anterior, mezcladas con agua bendita y saumerio, que luego son colocadas a los fieles.
Por Silvia Delmoral
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