La actividad se extendió desde las nueve de la mañana hasta las tres de la tarde en la sede de la institución benéfica de niños con cáncer y sirvió para reflexionar en torno a la necesidad afectiva y económica que padecen un grupo de infantes que atiende el ente sin fines de lucro.
Carlos Martínez, presidente de la Fundación Karla Martínez, agradeció vía telefónica todo el apoyo que ha recibido de manos de Fe y Alegría y en especial de los jovencitos de Huellas Rojas.
En los próximos días se estima que equipos de trabajo conformados por docentes, estudiantes y colaboradores visiten la unidad oncológica del Hospital Universitario Doctor Manuel Núñez Tovar de Maturín para llevar alegría a través de payasos, globo magia y cuenta cuentos.
Mientras que otra comisión llegará hasta los hogares de los chiquillos que recién fueron intervenidos quirúrgicamente con la finalidad de compartir junto a las familias y animarles en la dura situación de padecer una enfermedad que hace pensar en la muerte temprana de los que la padecen.
En el evento formativo-recreativo participó la directora de la unidad educativa Padre Luís Antonio Ormieres, Anais Morero, al igual que el subdirector, Alexis Marcano y en representación de la Escuela para Padres, María Graciela Herrera. A ellos se le suma los asesores juveniles Anghi Suárez, Isis Molinet y Romer Bastardo.
Cabe destacar que el vienes 05 de junio, un grupo de obreros del centro educativo encabezados por Alberto Cordero hicieron el mantenimiento de las instalaciones de la fundación ubicadas en el Guayabal, estado Monagas.
Por Romer Bastardo
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