Lo hizo este fin de semana con una jornada especial de siembra de 2.000 plantas, en la que participaron los comités conservacionistas Vivero Caratal, La Unión y Campo Real; alumnos de la Misión Sucre; jóvenes de la Cruz Roja; efectivos de Guardería Ambiental; miembros de Conciencia Humana y personal del ministerio. Las especies plantadas son: cedro, apamate, nim y algarrobo.
Gabriel Márquez, miembro del comité conservacionista La Unión, ha podido observar como se secan los afluentes. Márquez consideró que la reforestación de las cuencas es fundamental y llamó a los vecinos a colaborar y evitar incendios.Lino Prada, coordinador regional de la Misión Árbol, dijo que la cuenca alta del río Tarabacoa es donde se produce el agua que provee al acueducto de San Antonio del Golfo, municipio Mejía, y que está siendo afectado por la tala y la quema.
“Es la primera jornada del año aprovechando el inicio de las lluvias. Forma parte del plan nacional de conservación de cuencas y la Misión Árbol. Comenzamos con dos mil plantas en 2,5 hectáreas, pero la idea es reforestar cada año, al menos 500 hectáreas en esta zona. Antes las reforestaciones se hacían pagando a contratistas.
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