Lanzan en Venezuela la Gran Misión Continental Evangelizadora

Caracas (ZENIT.org) Durante una misa solemne celebrada en la ciudad de Barquisimeto, los obispos de Venezuela lanzaron el pasado miércoles 14 de enero la Gran Misión Continental Evangelizadora en este país.

La eucaristía estuvo precedida por el cardenal Jorge Urosa Savino, arzobispo de Caracas, cuya homilía publicó el pasado jueves la agencia misionera de la Santa Sede, Fides.

La Misión continental busca poner en práctica las enseñanzas del Concilio Plenario de Venezuela, que se ha realizado en cinco sesiones desde el año 2000, así como de la V Conferencia Episcopal Latinoamericana efectuada en Aparecida–Brasil en junio de 2007.

Este proyecto pretende realizar una acción pastoral que busque "llevar el mensaje de amor y salvación, el Evangelio y los dones de Cristo - su gracia, sus sacramentos, su consuelo -, a todos los venezolanos, especialmente a los no creyentes, a los alejados, a aquellos que han decaído en la vivencia de su fe", señaló el cardenal.

Ulloa Savino invitó tanto a los sacerdotes y religiosos así como a los laicos comprometidos a "participar con entusiasmo y alegría en ese gran proyecto de renovación de nuestra Iglesia".Y enfatizó que la situación en Venezuela sería muy diferente "si todos los católicos viviéramos a fondo nuestra fe".

Dijo además que cuando la familia practica de manera unida sus creencias, "se descarta el relajo afectivo, sexual, el adulterio y el divorcio, el aborto; la práctica religiosa va en contra de toda forma de maldad: el crimen, el asesinato, el flagelo de la droga, el terrorismo, la violencia política".

Apreciar los tesoros de la Iglesia

El Cardenal invitó a valorar el tesoro de la fe católica: "Más de mil cien millones de católicos en el mundo profesamos la fe en Jesucristo, acogemos a María Santísima como Madre de Dios y madre nuestra; estamos congregados en torno al Papa y a los Obispos, que son los únicos legítimos y auténticos pastores del pueblo de Dios".

"En el mundo entero, con tantas fuerzas disgregadoras, la Iglesia nos ofrece la hermandad de la fe, del amor y de la gracia sacramental" y recalcó que sólo en la Iglesia se encuentran los sucesores de los apóstoles, que recibieron el mandato de Jesús: "quien a vosotros escucha a mí me escucha", "A quienes les perdonéis los pecados les quedan perdonados"

El arzobispo de Caracas aclaró que la unidad en torno a la Iglesia no es una ideología ni la adhesión a un sistema político y que ésta: "está conformada por hombres y mujeres del mundo entero, de todas las naciones, razas y pueblos, de todas las condiciones sociales, y que viven en diversos sistemas políticos" y dijo que esta unión se da "en torno a Jesús, nuestro Dios y Señor".

Mostró también su disponibilidad así como la de sus hermanos en esta misión: "Somos 46 Obispos, al servicio de Dios, al servicio de todos los venezolanos, comprometidos con el pueblo de Venezuela".

"Allá estamos, sembrados en el corazón de nuestros fieles católicos, para servirlos desinteresadamente, y para hacer presente en medio de ellos a Jesucristo", señaló.

Advocación de la Virgen

Esta celebración eucarística se realizó dentro de la conmemoración del día de la Divina Pastora, una advocación especial de la Virgen a quienes se invocan miles de venezolanos.
"¡Feliz la Venezuela cristiana y católica!; felices nosotros cuando seguimos a Jesucristo y a la Divina Pastora; cuando cumplimos los mandamientos, cuando rechazamos el pecado en todas sus formas", dijo el cardenal.

El purpurado pidió a los fieles vivir su adhesión a la Iglesia de manera radical: "No podemos decir que amamos a Dios y a María, la Divina Pastora, si no vivimos de acuerdo a la Palabra de Dios, si no cumplimos los mandamientos".